Sonríe
A la vida,
a tus compañeros de ruta,
a lo bueno, a lo malo.
Sonríe a tus miedos,
así los transformarás.
Sonríe a tus ilusiones,
así las afianzarás.
Sonríe al infortunio,
así lo ahuyentarás.
Sonríe, siempre sonríe,
no importa lo que pase,
no importa lo que sientas;
una sonrisa transforma el alma,
la humedece de vida nueva.
Mabel Pruvost de Kappes
Renovación
Comienza por quitarte
la tristeza de los ojos
el dolor de tu rostro
el cansancio de tu espalda.
Sigue por llenarte
de luz la mirada
de música tus oídos
de sonrisa el alma.
Aunque sea obligado
el cambio hacia lo bueno
verás que con el tiempo
se acostumbra tu cuerpo,
ves todo más limpio
disfrutas más las cosas
mientras bailas la música
del mundo y la vida.
A veces no es
que el cielo está gris,
es que gastamos miradas
deslucimos ilusiones
sin sabernos abrir.
Cada día contamos
con un amanecer,
con la luz, con el aire
la esperanza y la fe.
Mabel Pruvost de Kappes
¿Qué esperas hoy de mí?
Cuántas veces me he preguntado
¿qué esperas hoy de mí?
Mas cuántas veces he ignorado
lo que querías Tú, Señor.
Te pido perdón, Rey de mi vida,
y sigo, preguntando,
aguardando Tu Respuesta.
Dame Tu Gracia para conocer
qué me pides
qué me entregas
cuál es el camino
cuál la tarea
que me aguarda en este día
que me acerca más a Ti.
Que hoy, mañana y siempre
sepa decirte, Señor,
como Jesús en el Huerto
“Que se haga Tu Voluntad”.
Mabel Pruvost de Kappes
Pregunta
¿Será tan importante
saber quién soy?
Si soy igual
aunque no lo sepa.
¿Será que si lo sé
seré también
mejor o peor?
¿No seré?
¿Será saber la clave
el incentivo
y la razón?
¿O será que el ser
necesita un ancla
para no vagar
perdido
en la incertidumbre
de no ser?
Será el caos, el saber.
Será el deseo, el saber
O será la maravilla
de vivir sabiéndome.
Mabel Pruvost de Kappes
La pérdida
Es una joya
única,
es un tesoro
sin par,
me lo dieron
con la vida
lo tenía que
cuidar.
Olvidé
que era valioso,
con él me
puse a jugar,
me reía de
su gracia
lo provocaba
sin más.
Ahora que lo
he perdido
no lo puedo
reencontrar.
Por favor,
si usted lo tiene
no lo vaya a
descuidar:
que el que
pierde su buen nombre
no lo recobra
jamás.
Mabel Pruvost de Kappes
Déjame ser…
Un niño con muchas ilusiones y la mirada
limpia
Déjame sentir
Tu cariño que construye mi familia…
Déjame aprender
Que al mundo lo hacemos cada día
Déjame ver
Que te sientes responsable de mi risa.
Déjame creer
En un Dios que me ama y que me anima
Déjame crear
Junto a ti el sustento de mi vida
Déjame crecer
Que aunque sé que hay dolores que lastiman
fui hecho para caminar
el sendero que me llena de alegrías,
sostenido por Jesús
y el Espíritu que ilumina.
Mabel Pruvost de Kappes
No hay comentarios:
Publicar un comentario